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Acompañamiento, becas y talleres para la comunidad académica y estudiantil marcan esta etapa inicial de la Unidad, que ha contado con la colaboración del Consorcio Science Up desde sus inicios. 

El 2024 fue un año de grandes avances para la Facultad de Química y Biología de la Universidad de Santiago de Chile (Usach), adscrita al Consorcio Science Up, con la puesta en marcha de iniciativas clave que impactaron positivamente a nuestra comunidad en diferentes ámbitos. Estos proyectos no sólo refuerzan nuestro compromiso con la academia, sino también con la sociedad, la sostenibilidad, la equidad de género y el bienestar.

La Unidad de Scouting Tecnológico de la Facultad de Química y Biología, dirigida por la gestora tecnológica y miembro del Consorcio Science Up, Dra. Daniella Utz, impulsó tres iniciativas para fortalecer los lazos entre la investigación académica y el sector productivo.

■ Fondo concursable de Investigación Asociativa: Se apoyó a dos académicas en la postulación a concursos de investigación aplicada y asociativa de la ANID, mediante asesoría especializada y acompañamiento en la formulación de sus proyectos.

■ Beca de trabajo en la industria para estudiantes en práctica profesional o etapa de tesis de pregrado y postgrado: Se promovió la vinculación de estudiantes con el sector productivo mediante becas de financiamiento.

■ Taller “comunicando el valor de la investigación –del laboratorio a la industria”: Ariel Matus, director de Aceleración en Innovar es Hoy, entregó herramientas tanto a estudiantes como a académicos y académicas para comunicar el impacto de sus investigaciones y promover su aplicación en la sociedad.

Autor Nicolás Gaona, periodista de la Facultad de Química y Biología Usach

En solemne ceremonia se distinguió a docentes, estudiantes, investigadores y funcionarios por su sobresaliente contribución al quehacer académico, científico y formativo de la unidad durante el último año.

En una solemne ceremonia, la Facultad de Ciencias de la Universidad Católica del Norte (UCN) celebró su 53° aniversario, jornada en la cual se hizo entrega de una serie de reconocimientos a integrantes de esa unidad académica, incluyendo entre ellos, el reconocimiento especial a la contribución del Consorcio Science Up al interior de esta casa de estudios.

Este trabajo liderado por su Project Manager, Pilar Gómez Yoma, tiene como propósito establecer alianzas estratégicas y una serie de iniciativas que han fortalecido las oportunidades y desarrollo de las carreras asociadas a las facultades adscritas al consorcio, entre ellas, la Facultad de Ciencias, Facultad de Ciencias del Mar y el Departamento de Ciencias Geológicas de la Facultad de Ingeniería y Cs. Geológicas (FICG).

Ceremonia

Al inicio de la actividad se realizó un emblemático minuto de silencio en memoria de los académicos del Departamento de Matemáticas, Óscar Rojo Jeraldo y Tomás Ávila Rodríguez, quienes fallecieron recientemente y dejaron una huella imborrable en generaciones de estudiantes y colegas de la Facultad de Ciencias UCN.

Posteriormente, en la ceremonia se distinguió a docentes, estudiantes, investigadores e investigadoras, funcionarios y funcionarias por su sobresaliente contribución al quehacer académico, científico y formativo de la unidad durante el último año.

En la oportunidad, la Vicerrectora de Investigación y Desarrollo Tecnológico de la UCN, Dra. Mónica Guzmán González, destacó el valor de estos espacios de encuentro señalando que “Estas instancias no son solamente formalidades; se configuran como verdaderos ritos que, cuando se desarrollan de manera intencionada y organizada, nutren y refuerzan nuestro sentido de comunidad y pertenencia. Son espacios donde se cultiva nuestra identidad colectiva, fortaleciendo los vínculos entre las personas y reafirmando un sello distintivo en el que siempre hemos trabajado con convicción como comunidad y como Universidad.”

Tras sus palabras, se dio continuidad a la ceremonia, en donde se entregaron galardones a diferentes grupos que han sido parte fundamental de la Facultad de Ciencias, destacando: labores ejercidas a lo largo del tiempo, gestión y compromiso, años de servicio, investigación relevante, docentes destacados, estudiantes integrales, funcionarias y funcionarios administrativos destacados y el reconocimiento especial a Pilar Gómez Yoma, por su destacada labor en el proyecto “Science Up, Ciencia e Innovación para el 2030”.

“Recibir este reconocimiento no solo me inspira a seguir trabajando con energía frente a los nuevos desafíos del Plan Ciencia 2030, sino que también representa el resultado de un valioso trabajo en equipo, gracias al compromiso y colaboración constante de todas y todos quienes han sido parte del proceso, así como al respaldo decidido de la Decanatura de la Facultad de Ciencias. Su apoyo ha sido fundamental para fortalecer la articulación con otras facultades, avanzando juntos hacia una visión común que proyecta nuestra identidad y compromiso con el desarrollo de la ciencia, agregó la Project Manager del Consorcio Science Up en la UCN, Pilar Gómez Yoma.

PRESENTACIÓN

Tras la entrega de reconocimientos, el decano de la Facultad de Ciencias y director del Proyecto Science Up en la UCN, Dr. Luis del Campo Conejeros, compartió una detallada presentación que incluyó cifras, logros y memorias históricas que reflejan el crecimiento sostenido de la unidad académica. “Los desafíos y exigencias que enfrentamos hoy no nos frenan; al contrario, nos inspiran. Estamos preparados para los cambios tecnológicos vertiginosos y los problemas globales apremiantes. Todo ello nos desafía a ser más creativos, innovadores y sensibles. Nos adaptamos, buscamos nuevas formas de avanzar y prosperar, porque nuestra pasión por el conocimiento y el compromiso con la excelencia no conocen límites.expresó.

Entre 2024 hasta la fecha de esta celebración, la Facultad de Ciencias se conforma por 193 personas, entre docentes, investigadores, investigadoras, personal de apoyo y directivos, contando con 618 estudiantes matriculados, consolidándose de esta manera, como un referente en la formación académica a nivel regional y nacional, continuando con un legado de educación, tecnología y ciencias en la UCN.

En un contexto donde el uso intensivo de la Inteligencia Artificial ha llevado a algunos a cuestionar públicamente la enseñanza de la matemática, la Usach abrió un espacio de reflexión para abordar este y otros desafíos que enfrenta la disciplina en este tiempo. 

Con la participación de la comunidad estudiantil y docente, se llevó a cabo en la Universidad de Santiago de Chile el Seminario “Reflexiones sobre la Matemática del siglo XXI”. El evento, realizado el 23 de abril en la Sala Armando Quezada de la VIME-USACH, fue impulsado por la carrera de Pedagogía en Matemática y Computación en colaboración con el Eje de Liderazgo y Participación Femenina (LPF) del Consorcio Science Up.

“Esta mesa temática buscó relevar el trabajo profundo de la disciplina y cómo se puede llevar al aula para formar a la ciudadanía del siglo XXI”, destacó la Dra. Daniela Soto Soto, jefa de carrera y coordinadora de LPF en la Facultad de Ciencia Usach, quien fue la moderadora de esta mesa temática.

La actividad se realizó en el marco de la Semana Nacional de la Matemática, que conmemora el nacimiento de Guacolda Antoine Lazzerini, académica quien fue la primera presidenta del Consejo Docente de Matemáticas, Física y Química de la Universidad Técnica del Estado (UTE) en 1954, cargo equivalente al de decana.

“Estos espacios reflexivos que se dan lugar en fechas como estas comparten nuestros objetivos como Eje, dando visibilidad al aporte de las mujeres en el desarrollo científico, por lo que es un placer participar en ellos”, resaltó la Dra. Claudia Ortiz Calderón, coordinadora de LPF de la Facultad de Química y Biología Usach.

El seminario contó con la participación de tres destacadas especialistas en geometría y modelación matemática: la Dra. Mariela Carvacho Bustamante, académica de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE); la Dra. Karina Vilches Ponce, académica de la Universidad Católica del Maule (UCM); y la Dra. María José Moreno Silva, académica de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC).

La Dra. Moreno destacó la importancia de estos espacios para reflexionar sobre las propias prácticas docentes, además de plantear cuáles son las necesidades y cualidades actuales que se deben fortalecer en las aulas.

Por su parte, la Dra. Carvacho subrayó la importancia de la vinculación de las universidades para difundir la disciplina a través de medios más cercanos a la población, como las redes sociales digitales. “La matemática está presente en la sociedad y la divulgación de las matemáticas es una de las formas de acercarla”, señaló.

“Fue muy interesante la charla porque tocaron varios temas. Cada exposición complementaba a las otras. Fue bastante provechosa para mí como estudiante y tesista, me quedé con muchas ideas”, comentó Camila Muñoz, estudiante de quinto año de Pedagogía en Matemática y Computación de la Usach.


También fue parte de la conversación el debate público sobre la utilidad de la enseñanza de la matemática en un entorno con un uso extensivo de la Inteligencia Artificial, tema abordado por la profesora Vilches.

“Necesitamos y necesitaremos enseñar matemática, ya sea por su constructo abstracto, aplicaciones o por la modelación matemática. Finalmente, la Inteligencia Artificial es más matemática y no va a reemplazar nunca a los profesores. La matemática es un conocimiento muy importante, que ha permitido el desarrollo tecnológico de la humanidad y la resolución de grandes problemas, por lo tanto, en el futuro, como los problemas son complejos, la matemática seguirá estando y quienes la desarrollen también. Va a ser siempre útil”, concluyó la Dra. Vilches.

Tres asignaturas serán impartidas durante el primer semestre del 2025 en el marco de esta certificación intermedia, cuyo fin es fortalecer el desarrollo de los y las estudiantes de ciencias potenciando su formación en innovación.

El Minor en Innovación y Emprendimiento de la Universidad de Santiago de Chile, diseñado por el Consorcio Science Up para la comunidad de pregrado de la Facultad de Ciencia y de la Facultad de Química y Biología, cuenta ya con su tercera generación de estudiantes, quienes se incorporaron en el primer semestre de 2025. 

“Este año se sumaron cinco integrantes a nuestro Minor y eso nos tiene muy contentos. Actualmente, son 13 estudiantes de cinco carreras de ambas facultades, de los cuales dos completarán todas las asignaturas propuestas finalizando este período, por lo que este semestre significa una de las grandes metas que el Eje de Armonización Curricular debe cumplir para formar profesionales altamente competentes en el desarrollo de iniciativas innovadoras que impacten en la industria y la sociedad positivamente”, destacó la profesional a cargo del Eje, Mg. Mónica Páez Iglesias.

Las motivaciones de los nuevos integrantes están marcadas por los programas desarrollados por el Consorcio Science Up en los últimos años. Uno de ellos es Innova en el Aula, que financia la implementación de innovaciones educativas en asignaturas ya presentes en las mallas curriculares, el cual busca fomentar el desarrollo del espíritu innovador y emprendedor en estudiantes, apoyando las iniciativas de docentes.

“Postulé porque tomé un curso que se llama Técnicas Experimentales 2 y nos hicieron hacer un proyecto que fuese una solución a un problema en la industria. Diseñé un robot y fue súper entretenido. Después surgió la oportunidad de este Minor, que era de innovación, y pensé: me gusta esto de la innovación, ¿por qué no intentarlo?”, expresó la estudiante de Ingeniería Física, Camila Urtubia Miqueles.

Esta certificación está compuesta por cinco asignaturas, de las cuales se dictan cuatro este semestre: Ciencia, Innovación y Emprendimiento, Prototipos Científicos-Tecnológicos, Creatividad e Innovación y Desarrollo de Oportunidades de Negocios Tecnológicos, esta última a cargo del profesor Paolo Saxton González.

“Los procesos de investigación científica son largos y, en las oportunidades, existe un concepto llamado Time to Market, que es el tiempo para aprovechar una oportunidad. Por lo tanto, ahí está el desafío de esta asignatura: cómo hacer converger la investigación científica con ese punto”, señaló el profesor Saxton.

En el taller se abordarán los beneficios de este enfoque de enseñanza y se explorarán las oportunidades de implementación en la PUCV. 

El Consorcio Science Up extiende la invitación al cuerpo docente de la Facultad de Ciencias PUCV a participar del taller virtual sobre la metodología COIL. Esta capacitación, impartida por Pablo Zamora, Coordinador de Innovación y Emprendimiento de la PUCV, se llevará a cabo el viernes 16 de mayo a las 14 horas, mediante la plataforma Zoom. 

Inscríbete al taller online aquí

El taller abordará distintas temáticas, entre ellas, se explicará por qué es importante implementar un curso COIL en carreras del área STEM y cuáles son los beneficios de esta metodología. Asimismo, se entregará ejemplos de sus aplicaciones en diversas áreas académicas, con el objetivo de incentivar a las y los participantes a incorporar este enfoque en sus asignaturas. 

Por otro lado, el taller profundizará en las oportunidades de apoyo que entrega la Universidad para quienes quieren llevar adelante iniciativas COIL, como por ejemplo; espacios disponibles para facilitar las actividades sincrónicas, apoyo del equipo Science Up en la preparación de actividades complementarias; así como también, aquellas iniciativas que entregan financiamiento para proyectos COIL, recursos que pueden ser utilizados para la contratación de ayudantes, entre otros.

Para asistir al taller, las y los interesados/as deben inscribirse en el siguiente formulario aquí.

Con un financiamiento de más de 130 millones de pesos, el equipo de trabajo podrá alcanzar un nivel superior de madurez tecnológica, generar una versión beta, comenzar testeos y tomar acciones para la protección de la tecnología. 

Un gran hito logró el emprendimiento de base científica-tecnológica “MagVISC”, desarrollado por Pablo Silva, Elías Santacruz, estudiantes del Doctorado en Ciencias Físicas de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), junto a Francisca Rojas, Doctora en Ciencias mención Química de la misma Casa de Estudios, quienes recientemente se adjudicaron el fondo Start Up Ciencia 2025 de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), a través de su empresa Phynovo SpA, de la cual son co-fundadores.

Este fondo entrega un financiamiento de $131.171.000, el cual, según Pablo Silva, director del proyecto, les permitirá avanzar en el nivel de madurez tecnológica del viscosímetro portátil, y lograr hitos clave para acercar la tecnología al mercado, tomar acciones para la protección de la tecnología, realizar la validación del dispositivo en entornos relevantes y conseguir la aprobación de las regulaciones y certificaciones necesarias.

MagVISC fue desarrollado con el apoyo de la académica del Instituto de Física, la Dra. Claudia Trejo, y el docente de la Facultad de Ingeniería, Francisco Martínez, así como de estudiantes, quienes estuvieron a cargo de realizar las validaciones iniciales del dispositivo en el laboratorio.

Pablo Silva señaló que “Estamos super contentos con esta adjudicación, esto lo logramos gracias al apoyo de Science Up y de los distintos profesores que participaron y distintas empresas que nos han apoyado para desarrollar este proyecto. Nos complementamos bien con Elías y las distintas disciplinas que nos ayudan para poder lograr este objetivo. Con la adjudicación, el proyecto va a continuar otra aventura para desarrollar la versión beta”.

“Destacamos el apoyo de la Oficina de Transferencia y Licenciamiento (OTL) de la PUCV, porque ellos nos hicieron el scouting de Propiedad Intelectual que añadimos a la postulación y que fue muy útil para nosotros, porque nos percatamos del potencial de patentamiento que tenía nuestra tecnología”, agregó.

Asimismo, el equipo destacó la importancia de que la universidad promueva la formación de Empresas de Base Científico-Tecnológica (EBCT), ya que es una forma directa de impactar positivamente a la sociedad —personas, industrias, organizaciones sociales, entre otros—. A pesar del riesgo asociado al desarrollo tecnológico, creen que esto permitirá en el futuro posicionar a Chile como un exportador de tecnologías, y no solo de materias primas.

Por su parte, Elías Santacruz, co-fundador de Phynovo Spa y gerente del proyecto MagVISC, señaló que esta adjudicación consolida los esfuerzos de varios años: “Este proyecto fue particularmente desafiante, pero lleno de aprendizajes, dado que personalmente no tenía experiencia en este tipo de convocatorias. Pero junto con el equipo que se formó, además del arduo trabajo, pudimos sacarlo adelante. La adjudicación fue gratificante ya que significó que todo el trabajo de todos estos años, al fin dio frutos”. 

El vicerrector de Investigación, Creación e Innovación de la PUCV, Luis Mercado, destacó el compromiso institucional con la promoción del emprendimiento científico “en la PUCV apoyamos los emprendimientos de base científico tecnológica en sus diversas instancias, desde la investigación, la innovación, la protección y la incubación de negocios. El Ministerio de Ciencias de Chile, está impulsando a través de diversos proyectos la creación de emprendimientos aprovechando todo el potencial innovador de los investigadores en las universidades. En este caso en particular se trata del apoyo a una startup, la que deriva del trabajo de estudiantes de postgrado de la Facultad de Ciencias de nuestra universidad”.

María José Henríquez, directora ejecutiva de Science Up, valoró la adjudicación de este fondo, indicando que “Este logro refleja el potencial de los talentos científicos de la Facultad de Ciencias de la PUCV al conectarse con las herramientas de apoyo adecuadas. Desde Science Up hemos acompañado a MagVISC desde sus primeras etapas, y verlos avanzar por un camino de consolidación de su tecnología, es una enorme satisfacción. Nos motiva a seguir fortaleciendo un ecosistema que impulse la innovación desde la Universidad hacia la sociedad”.

Vania Badilla, coordinadora de la OTL, valoró el trabajo desarrollado “Con el equipo de investigadores venimos trabajando desde una tecnología anterior, Hemovisc, donde pudimos proteger y avanzar en la hoja de ruta, validando la tecnología, trabajando el modelo de negocio y las formas de licenciamiento. Los pasos previos fueron sin duda una “escuela” para continuar desarrollando otras tecnologías como MagVISC y avanzar más rápidamente con los conocimientos ya adquiridos. Es por esto, que desde la OTL, apoyamos la formalización del emprendimiento PHYNOVO, con lo cual pudieron postular al fondo Start Up Ciencia que hoy se han adjudicado”.

Este proyecto nació el año 2023, el cual se adjudicó el Programa “Growing Up: Ejecuta tu Idea 2023” de Science Up, y posteriormente fue parte del Programa de Valorización de Tecnologías, organizado por Science Up y la OTL. Esta iniciativa, desarrollada durante el año pasado, estaba enfocada en fortalecer proyectos científicos con alto potencial de desarrollo y madurez tecnológica. Asimismo, durante marzo del 2025, MagVISC recibió una serie de mentorías de la Incubadora de Negocios de la PUCV, Chrysalis.

¿Qué es MagVISC?

MagVISC es un viscosímetro portátil, de bajo costo, rápido análisis y alta precisión, diseñado para analizar muestras de 200 microlitros, sin requerir limpieza posterior. Este dispositivo cuenta con un tiempo de medición de dos minutos, lo que permite resultados en tiempo real y ayudaría a la optimización a cadenas de valor en industrias, así como para investigadores y centros de investigación.

Según Pablo, su uso podría reducir significativamente los costos de análisis en diversas industrias, al tiempo que ofrece una alternativa más accesible en comparación con los equipos convencionales, los que requieren largos tiempos de análisis y limpieza posterior.

El programa otorgará un presupuesto de un millón de pesos para que docentes de la PUCV, UCN y Usach puedan implementar innovaciones en asignaturas del segundo semestre de 2025.

Por segundo año consecutivo, Science Up invita al cuerpo docente de las Facultades de Ciencias adscritas a Science Up (PUCV, UCN y Usach) a participar del programa “Innova en el Aula”, iniciativa que entrega el financiamiento de 1.000.000 de pesos para la implementación de innovaciones en las salas de clases. 

Este programa, abierto desde el 5 de mayo hasta el 13 de junio, busca fomentar el espíritu de innovación y emprendimiento en estudiantes de las Facultades de Ciencias. 

Para lograr este objetivo, los/las docentes incorporarán en sus asignaturas nuevas metodologías de enseñanza de los contenidos científico-tecnológicos, algunas son: aprendizaje basado en proyectos, aprendizaje basado en problemas, aula invertida, aprendizaje por descubrimiento, gamificación, entre otras.

Cabe mencionar que estas propuestas deberán ser ejecutadas durante el segundo semestre de 2025. Para postular, las/los interesados/as deberán cumplir una serie de requisitos, descritos a continuación: 

¿Cómo postular al programa?

Para postular, las y los interesados/as deben completar el formulario de inscripción, disponible aquí, y enviarlo al correo electrónico postulaciones@scienceup.cl con el asunto: Postulación INNOVA EN EL AULA / Nombre de la directora o director del proyecto. 

El plazo de entrega cierra el 13 de junio a las 23:59 horas. En el formulario, los/las postulantes deberán detallar los siguientes aspectos: 

El proceso de adjudicación se llevará a cabo entre el 16 junio y 31 de junio de 2025, mientras que la ejecución del mismo comenzará el segundo semestre académico del 2025.

Talleres de postulación

Con el propósito de resolver dudas, profundizar en los contenidos del programa y ejemplificar la aplicación de metodologías activas en el aula, se impartirá una serie de talleres virtuales de postulación, cuyas fechas y horarios se encuentran a continuación:

Para participar, deberás inscribirte en el siguiente formulario aquí. 

Las bases del Programa se encuentran a continuación

Bases Innova en el Aula 2025_final (1)Descargar

Entre ellas, se realizó el lanzamiento de la Academia Maker de Science Up, una plataforma abierta a la comunidad de la PUCV, UCN y Usach.

Con diversas actividades, eventos, talleres y el lanzamiento de una plataforma virtual, el Consorcio Science Up celebró la Semana de la Creatividad y la Innovación en sus tres universidades adscritas, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), la Universidad Católica del Norte (UCN) y la Universidad de Santiago de Chile (Usach). 

Esta iniciativa se enmarcó en la conmemoración del Día Mundial de la Creatividad y la Innovación, fecha establecida por las Naciones Unidas y celebrada cada 21 de abril, que releva la importancia de potenciar el pensamiento creativo y fomentar las ideas innovadoras.

Ceremonia Usach

En este contexto, en la Usach se llevó a cabo la Ceremonia del Día de la Creatividad y la Innovación, instancia que contó con la participación de autoridades del ámbito científico, entre ellas: Cristian Cuevas Vegas, Subsecretario del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación; Patricia Muñoz Palma, Subdirectora de Redes, Estrategia y Conocimiento de ANID; Maricho Gálvez Bastida, Gerenta de Emprendimiento de Corfo; Fernando Hentzschel Martínez, Gerente de Capacidades Tecnológicas de Corfo; Alberto Monsalve González, Vicerrector de Investigación, Innovación y Creación (VRIIC) de la Usach; y María José Henríquez, Directora Ejecutiva del Consorcio Science Up.

Durante la jornada, la Directora Ejecutiva de Science Up presentó la Cuenta 2021-2024, destacando algunos de los principales hitos alcanzados durante la implementación de la Etapa II del Plan Estratégico. Además, reflexionó sobre la importancia de la creatividad y la innovación como competencias esenciales para el desarrollo del país.

Por su parte, el Decano de la Facultad de Ciencia de la Usach, Juan Escrig Murúa, valoró la instancia señalando: “Estamos muy contentos. Quisimos mostrar no solo los indicadores, sino también a las personas que hacen posible este proyecto: la comunidad estudiantil, el cuerpo académico y quienes han egresado. Porque Science Up no se trata solo de cifras; se trata de transformación, de cómo estamos cambiando vidas a través de la ciencia”.

Durante la jornada, también se brindó un espacio para reconocer experiencias y testimonios de estudiantes y académicos/as que han participado en diversas iniciativas del Consorcio Science Up. El primero en presentarse fue el Dr. Juliano Casagrande Denardin, académico de la Facultad de Ciencia, quien se adjudicó dos programas Innova en el Aula (2023 y 2025).

A continuación, Daniela Gómez Fuentes, estudiante de Bioquímica y de la primera generación del Minor de Innovación y Emprendimiento de la Usach, quien compartió su experiencia incursionando por primera vez en temáticas de i+e, seguida del Dr. Ernesto Gramash Labra, académico de la Facultad de Ciencia, quien se adjudicó el programa VincuLAB (2022 y 2024) y el programa de Rápida Implementación (2023). Posteriormente, la Dra. Jenny Blamey Alegría, académica de la Facultad de Química y Biología, relató su experiencia participando en iniciativas como la Red de Mentoras y el concurso de cuentos: “11F en Breves”.

Concurso Pitch 

La jornada culminó con la final del concurso de Pitch del Programa Growing Up: Ejecuta tu Idea 2024, que tuvo a tres proyectos finalistas: “InteractiLab”, “Vitalbrotes” y “Antagonistas peptídicos para el receptor P2X7”. Este último, dirigido por la reciente egresada de Bioquímica, Nelly Núñez Rojas, fue el que se consagró con el primer lugar.

Al respecto, Nelly mencionó que: “Me sentí muy contenta de poder mostrar el trabajo que he estado haciendo todos estos meses, y sobre todo, considerando que es para personas que, como yo, tienen una enfermedad autoinmune”. 

Sobre su preparación para esta competencia, agregó que: “Pude generar este pitch porque dentro del programa (Ejecuta tu Idea) tuvimos todo tipo de talleres. El primero que tuvimos fue cómo crear un pitch y gracias a ese taller pude diseñar de buena forma el pitch, porque antes de este proyecto nunca había hecho nada relacionado”, dijo la directora del proyecto.

Finalmente, a través de un video se presentó la primera versión del evento “Desafío Science Up”, el cual reunió a actores del sector productivo, estudiantes y académicos/as. El foco estuvo en la validación de problemas reales de la industria, etapa clave del emprendimiento para superar el denominado “valle de la muerte”.“Creo fundamental transferir conocimiento desde mi experiencia, ya que salí de la academia para emprender. Compartir mi visión como científica y ahora emprendedora es valioso. Estudiantes, colegas y profesores deberían ver que emprender es una opción real y cercana”, destacó la Dra. Daniela Geraldo Durán, CEO de Breaking Cupper e integrante de la Red de Mentoras Science Up que participó en esta versión. 

Semana de la Creatividad e Innovación

Por otro lado, durante la semana en la UCN se llevaron a cabo una serie de talleres, dirigidos a la comunidad estudiantil y al cuerpo académico. En la sede de Coquimbo se realizó el ciclo Biomaker: “Creatividad es i+e” (leer la nota aquí), y en Casa Central en Antofagasta se organizó el ciclo Maker: “Ciencia, Creatividad e Innovación” (leer la nota aquí).

Asimismo, de forma online se realizó el lanzamiento de la Academia Maker (acceder aquí), una plataforma virtual educativa en torno a temáticas de innovación y emprendimiento dirigida a la comunidad universitaria de las tres universidades adscritas. 

Finalmente, en la PUCV se realizaron tres actividades, una de ellas fue un stand de difusión de los programas activos, seguido de una Maker_talks (leer nota aquí) organizado en colaboración con el Valparaíso Makerspace. Para cerrar la semana, el 25 de abril se realizó un taller sobre Fabricación Digital, dirigido a académicos/as PUCV, quienes adquirieron capacidades básicas para diseñar y luego prototipar sus proyectos. 

Entrevista Tu Nuevo ADN de Radio ADN aquí

La destacada inventora y académica de la Facultad de Química y Biología de la Usach, Dra. Claudia Ortiz Calderón, conversó con Andrea Obaid, conductora del programa radial Tu Nuevo ADN, sobre el proceso de patentamiento en Chile y las estrategias que le han permitido obtener sus nueve patentes vigentes.

Durante el espacio, explicó su visión sobre la aplicación de resultados científicos en la sociedad, considerando el patentamiento como un pilar de la innovación. Conversación donde también analizó la brecha de género en el desarrollo de patentes, abordando sus causas estructurales y los avances registrados en los últimos años.

Entrevista:

Tenemos una invitada muy interesante, la Dra. Claudia Ortiz Calderón, bioquímica, Dra. en Ciencias Biológicas de la Universidad de Chile, profesora en la Universidad de Santiago, donde lidera el Laboratorio de Bioquímica Vegetal y Fitorremediación, y además, es Coordinadora del Eje de Liderazgo Femenino del Consorcio Science Up

Hola, Andrea, buenas tardes, gracias.

Bueno, en primer lugar preguntarte sobre este tema, además que el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación dio a conocer una radiografía sobre la brecha de género en muchos ámbitos y una de esas es en las patentes. ¿Cómo estamos en nuestro país? 

Efectivamente, como tu dices hay una brecha importante, pero también decir que estamos igual que todos los países en el mundo, o sea, en el fondo esa es la tendencia, en donde tenemos un 20%, 19% digamos de patentes que corresponden a investigadoras o inventoras. 

Bueno, de hecho estaba acá viendo, por ejemplo el porcentaje de inventoras chilenas con patentes solicitadas respecto al total de personas que realizó algún tipo de invención y en comparación con otros años el 2019, 22%, el 2020, un 20%, el 2021, un 20%, ya el 2022, un 24%. Y yo no sé si esto es como variable o no, sube, baja, sube, baja. No hay como una constante en aumento. 

Correcto. De hecho, si uno mira históricamente, hay varios trabajos en la INAPI, ha hecho varias radiografías. Hay un análisis entre el 2013 a 2022 y ahí se llega a un promedio de un 19%, digamos, en términos de brecha. Pero si uno mira la tendencia, a veces es positiva, a veces es negativa, entonces es súper variable. Entonces, claramente ahí hay algo que está pasando y que se tiene que abordar. 

Claro, o sea, de hecho, si vemos la distribución de trabajos indexados con autoría según sexo acumulado del año 2008 al 2022, 35% mujeres, 65% hombres. O sea, sigue habiendo esta brecha enorme. Antes de que analicemos esto, porque igual es un tema bien interesante, tú has sido bien lideresa en el tema de las patentes, tienes nueve patentes, pero para que la gente que no sabe y que nos está escuchando, ¿qué es una patente? ¿Qué es patentar una idea o una invención? 

Bueno, patentar es una forma de proteger un desarrollo, en este caso, por ejemplo, una tecnología, un producto, un proceso. Es una manera de proteger la propiedad intelectual. Entonces, hay varias maneras. No es solamente patentar. O sea, patentar es una de ellas. Y desde el punto de vista de las tecnologías, normalmente lo que uno hace es generar patentes de invención.

Eso significa que tú, dentro de la universidad o en una empresa, creas algo y ¿eso lo patentas? ¿Qué desarrollo tiene que tener esa invención o esa investigación? Porque también recordemos que, claro, se hace una investigación, se publica en un paper, que es una revista científica, y me imagino que eso después puede saltar a ser un producto que se patenta, ¿cómo es? 

Bueno, en el caso de las patentes las pueden presentar universidades, centros de investigación, pero también, ojo, que es importante decir que las patentes también las pueden presentar empresas o personas naturales. De hecho, en algunos casos, el volumen de patentes presentadas por personas naturales es mayor. Las universidades también tienen, digamos, un papel importante allí. Y desde el punto de vista del proceso, normalmente el desarrollo ocurre y antes de publicarse, porque eso puede afectar a la novedad de la patente, tú tienes que entrar en el proceso de patentamiento. Por lo tanto, las publicaciones vienen después de haber presentado la patente, porque si no, se puede afectar justamente el proceso de patentamiento.

Y ahí, en el caso que tú desarrollas un invento en la universidad, ¿quién se queda ahí con la patente? ¿Es conjunta, es quien lo hace o es la universidad? Porque igual ahí siempre hay un tema, ¿no?

Claro, mira, cuando los desarrollos son derivados de fondos públicos, ANID, por ejemplo, Corfo, la propiedad de la patente es siempre del beneficiario, en este caso la universidad, o el centro de investigación, o la empresa, digamos, quien sea el beneficiario directo de ese fondo. Pero cuando uno hace un desarrollo en conjunto con empresas, es decir, participan empresas en el proyecto, posterior al desarrollo, uno negocia con la empresa, por ejemplo, la exclusividad de uso de la patente, por ejemplo, la exclusividad de uso de la patente por un determinado tiempo, una determinada cantidad de años, por una determinada tasa y eso sí lo ve la universidad y es caso a caso 

Ya, y eso son finalmente soluciones que se venden a empresas de invenciones que no existían antes en el mercado o que existían pero quizá algo que está hecho en Chile es distinto que algo que puede comprar una empresa en China o en India 

Claro, la idea de una patente es que tenga justamente este grado de innovación suficiente que le permita, digamos, ser patentada porque pasa por un proceso, pero al mismo tiempo una patente per se no tiene un gran valor si no es transferida. Y eso es una tarea a la que hoy día las universidades se están abocando fuertemente, porque puedes tener un banco enorme de patentes, pero si esa patente no es transferida a un tercero, tal como tú dices, entonces esa patente no genera valor. Por lo tanto, la transferencia es fundamental. No solo el patentamiento, sino que también el proceso posterior. 

Viendo las cifras de INAPI, el 21% de las patentes son de mujeres y más del 70% de hombres. ¿Por qué pasa eso? Igual en Chile no se patenta mucho, todavía falta, en comparación con otros países que lideran en este campo. ¿Qué pasa ahí? O sea, somos pocos inventores los chilenos porque, desde mi perspectiva, y analizando un poco el ecosistema, igual hay un desarrollo súper potente en ciencia, tecnología, conocimiento e innovación en el país, sobre todo desde regiones. Pero, ¿por qué no se llegan a patentar? ¿Es muy caro, es complejo el proceso, o los inventos quizás no son como para patentarlos? 

Mira, uno podría decir que son todas las anteriores, porque finalmente la brecha de género en términos de patentes también es un reflejo de la brecha género en general en ciencia y tecnología. El campo del patentamiento y de la invención siempre ha sido un área masculina, por lo tanto, ahí digamos esa brecha es un tema cultural que evidentemente hay que ir avanzando sobre ello. Pero por otro lado, sí, el proceso de patentamiento tiene un costo porque tú tienes que presentarlo a través de una organización, de una institución, que hace todo el trámite y eso tiene un costo, pero además los procesos no son cortos. Hoy día el promedio de un patentamiento de una tecnología estamos hablando de unos cuatro o cinco años, sin embargo, en mi caso, por ejemplo, se han demorado bastante menos, estoy hablando de tres años desde que tú la presentas. Eso es súper rápido y eso es gracias a que hoy día se puede tramitar a través del convenio PCT, que es un convenio internacional para poder patentar y eso hace que sea una especie como de camino no fast track, no es más rápido, no te saltas ni un proceso, pero sí acorta los tiempos. 

Pero si no patentas, no puedes vender. 

Si no patentas, tú no puedes transferir la tecnología, y por lo tanto esa tecnología en realidad puede ser de uso amplio. O sea, si tú no lo patentas, cualquiera lo puede usar. La idea del patentamiento es precisamente darle valor a ese desarrollo y a ese conocimiento. 

Bueno, de hecho estaba acá viendo que durante el 2024, el Instituto Nacional de Propiedad Industrial, o INAPI, concedió un total de 2.033 patentes por invenciones, donde el 89% fue a solicitantes extranjeros y solo el 10,8% a residentes nacionales. Y estas patentes entregadas por el INAPI otorgan la exclusividad para el uso comercial de estas invenciones, que recién lo conversamos. O sea, es demasiada la diferencia, extranjeros versus chilenos. 

Sí, pero eso ocurre justamente por el PCT. Por ejemplo, si yo presento una patente hoy día vía PCT, esa patente se presenta simultáneamente en Brasil, Australia, Estados Unidos, en aquellos países en donde nosotros pensemos que la tecnología puede tener un impacto interesante desde el punto de vista de la venta, de la venta de la tecnología. Por lo tanto, eso ocurre también desde fuera. O sea, alguien ve a Chile, y eso es interesante, yo creo que es un muy buen indicador para Chile, porque significa que a Chile se le está viendo como un país interesante para poder presentar una patente y generar una tecnología, porque va a haber ahí un nicho de mercado para esa tecnología. 

Uno puede decir que las cifras no son muy alentadoras, pero desde el punto de vista que tú describes, claramente es interesante. Ahora, entendiendo que estaba viendo que el año pasado INAPI recibió 4.102 solicitudes, o sea, no todas las patentes que se presentan quedan aceptadas? ¿Hay un proceso también? 

Claro, justamente ese es el proceso. Es decir, el proceso en realidad de presentar la patente es relativamente rápido porque depende de qué tan rápido tú escribas el disclosure, el documento inicial, pero posteriormente una vez que ingresa INAPI pasa por una serie de peritos y van evaluando las diferentes características que debería tener esa patente. Por lo tanto, una patente se puede quedar en el camino, perfectamente, porque tú no fuiste capaz de sostener, digamos, una objeción de los peritos. Entonces, en ese sentido, sí, hay muchas patentes que se quedan en el camino. 

Ahora, yo veo que esto es súper positivo. Estamos hablando que ya tenemos 4.000 más o menos solicitudes de patente, quizás no todas quedan. Ahora, el tema es la brecha de género principalmente, que es el tema que hoy día nos convoca, pero estaba acá viendo que, según los datos de INAPI, Estados Unidos lideró el listado de países con 1.084 solicitudes el año pasado, seguido por Chile, después Suiza, Alemania, China. O sea, igual estamos bien, o sea, estamos avanzando, qué tiene que ver con lo que yo decía, que tenemos un desarrollo de ciencia, tecnología, de transferencia tecnológica en el país que es súper bueno.

Sí, absolutamente. Si uno mira las cifras han ido mejorando y claramente eso tiene que ver con las políticas que se están implementando a nivel de ciencia y tecnología en el país. 

Ahora, las principales áreas tecnológicas donde están estas patentes son productos farmacéuticos, un 25%, biotecnología, un 13%, productos orgánicos elaborados, un 10%, ingeniería química, un 7% y también química de materiales. En ese sentido, quería también preguntarte sobre tus patentes. Tú tienes nueve patentes, ¿no? 

Nosotros hemos presentado nueve. Hay una que está en proceso ahora, hay una que se cayó en el camino y las otras están concedidas. Así que sí, hemos presentado hartas y nos ha ido bien, digamos, con el proceso. 

Y eso quería saber porque, bueno, tú eres líder del Laboratorio de Bioquímica Vegetal y Fitorremediación de la Universidad de Santiago de Chile, has desarrollado soluciones biotecnológicas innovadoras para principalmente mitigar el impacto ambiental generado por las actividades industriales, especialmente en el sector minero. Y además tu labor ha estado también representada en cerca de 40 publicaciones científicas en estas patentes que mencionabas. Y ahí me gustaría que a lo mejor nos cuentes sobre una de las patentes, esta que recién mencionaba, de qué se trata, cuál es la importancia, cuál es el impacto que puede tener en la sociedad y en el mercado.

Mira, voy a mencionar la primera patente que fue súper larga, digamos, porque fue un proceso largo que tiene que ver con desarrollar una tecnología basada en plantas para poder mejorar y remediar un suelo contaminado por elementos metálicos o por desechos de la minería. Y eso se llama fitorremediación. Básicamente es una tecnología basada en plantas y que está muy en línea con las soluciones basadas en la naturaleza. Y actualmente estamos trabajando con cianobacterias que son autóctonas, que hemos colectado desde el desierto Atacama, y tienen un potencial biotecnológico enorme para la mitigación de material particulado, para el mejoramiento del suelo, para la interacción con plantas y son beneficiosas para las plantas, etc. Entonces estamos explorando también nuestro capital nativo finalmente. 

Sí, bueno, de hecho conoció el término de biorremediación por el proyecto Las Salinas en Viña del Mar, ubicado en el borde costero, este terreno de 16 hectáreas, que es un proyecto de las empresas COPEC. Tiene que ver más o menos con eso, ¿no? 

Claro, la biorremediación como definición directa, digamos, está asociada a microorganismos solamente. Por eso es que se habla de fitorremediación porque fito, digamos, el prefijo para planta. Entonces, las plantas sí no actúan solas, o sea, ninguna planta, digamos, es como nosotros tenemos microbiota intestinal, las plantas tienen microbiota también. Por lo tanto, el conjunto de plantas más microorganismo puede generar un impacto súper positivo sobre un ambiente que está degradado o contaminado. 

Por ejemplo, con esa patente, ¿qué es lo que has logrado en transferencia tecnológica?

Mira, nosotros hemos hecho trabajos con Codelco, con otras mineras también, y eso nos ha permitido generar pilotos de remediación en sitios que están impactados por estas actividades mineras, incluyendo depósitos de relaves, o sea, arenas de relaves, que es un pasivo ambiental bastante molesto y que podría ser muy perjudicial en la minería. Y eso ha permitido mejorar la calidad del sustrato en varios porcentajes, aumentar por ejemplo la materia orgánica, aumentar la microbiota, mejorar la cantidad de nitrógeno, etc. Y sobre todo mitigar la emisión de material particulado porque las raíces funcionan como una especie de red, ¿no es cierto?, que va a retener este suelo que está degradándose o que se está dispersando. 

¿Y esto en cuánto tiempo se podría decir que un suelo queda utilizable y utilizable para el ser humano, para los animales. Te lo pregunto porque este proyecto de Las Salinas generó un montón de controversia, donde los vecinos y vecinas se quejaban de que no, que a pesar de que haya evidencia científica, a pesar de que está esta tecnología, es imposible vivir en esos suelos por la contaminación. ¿Qué se puede lograr? 

Mira, depende del sustrato que estés tratando, porque, por ejemplo, las arenas de relave no son suelo y nunca lo van a ser. Entonces, en ese sentido, hay que ser como súper claro y definir qué es lo que estoy remediando. Si es un suelo, por ejemplo, que está degradado porque ha sufrido el impacto, porque se ha depositado, por ejemplo, o un derrame de petróleo ha habido, digamos, eso sí se puede remediar dependiendo de la profundidad y el impacto, porque a veces es tan fuerte, es tan grande el impacto, que de verdad lo único que queda es remover remover y sacar y a lo mejor remediar ex situ que es lo que también se utiliza pero en el caso de las plantas ahí hay un horizonte de remediación que depende de la longitud de las raíces por ejemplo y de la capacidad de la planta para poder hacer esta conversión de compuestos orgánicos e inorgánicos o la remoción de metales por ejemplo y eso significa que uno tiene que saber qué planta es, saber cómo es el sustrato. Por eso se habla de tecnología, porque no es llegar y plantar. Mucha gente piensa que vamos a poner una planta aquí y va a mejorar. 

Son procesos lentos. 

Son procesos lentos porque son procesos biológicos. Y están sujetos a los ciclos naturales también. 

Claudia, para ir cerrando, dos cosas. Una, entre las personas que nos están escuchando, hay muchas mujeres investigadoras que escuchan el programa. ¿Qué les recomendarías tú en el caso de tener una idea, una invención y para que esto también acorte esta brecha de género que tenemos entre hombres y mujeres con las patentes de las invenciones?

Mira, yo lo que sugiero siempre es trabajar en equipo porque uno llega más lejos y más rápido, pero nunca dejar el liderazgo, porque eso también pasa mucho, la transferencia del liderazgo, digamos, hacia algún colega, qué sé yo. Entonces, liderar el grupo, liderar la idea porque es tu desarrollo, ¿no es cierto? Tú partiste con ello, pero creo que trabajar en equipo es súper importante. Entonces, nunca dejar la cabeza, digamos, de lo que tú crees que es interesante y seguir adelante.

La realización de tres jornadas de introducción a herramientas Maker, áreas temáticas y aplicabilidad en la Casa Central de la UCN, se suman al Ciclo de Talleres que comenzaron el 16 de abril en el Campus Guayacán, sede Coquimbo, los que se extenderán hasta el 25 de junio.

Durante la semana de la Creatividad y la Innovación, el Consorcio Science Up realizó el Ciclo de Talleres Maker “Ciencia, Creatividad e Innovación” en la Casa Central de la Universidad Católica del Norte (UCN), los que estuvieron dirigidos a estudiantes, académicos y académicas de la Facultad de Ciencias y Facultad de Ingeniería y Ciencias Geológicas.

La realización de esta actividad tuvo lugar al interior del Laboratorio Maker Ingenierías UCN, durante los días 23, 24 y 25 de abril, donde se abordaron contenidos de Introducción a Herramientas Maker, áreas temáticas y aplicabilidad.

“La realización de estos talleres representa una valiosa oportunidad para fomentar la cultura Maker en la UCN, promoviendo espacios de creatividad al interior de la comunidad universitaria. En esta ocasión, destacamos el impulso de proyectos colaborativos que integran distintas facultades, fortaleciendo el trabajo interdisciplinario. Esta iniciativa, desarrollada en alianza con el Consorcio Heuma, consolida y amplía la red de trabajo de los proyectos Ciencias e Ingenierías, generando un impacto significativo en el ecosistema de innovación de la Institución”, agregó la Project Manager del Consorcio Science Up en la UCN, Pilar Gómez.

El Ciclo de Talleres Maker en Antofagasta se suma al ciclo de diez talleres proyectados hasta el 25 de junio en campus Guayacán, Coquimbo, los que buscan de forma integrada fortalecer competencias tecnológicas, creativas y colaborativas en la comunidad universitaria.

Para abordar estas temáticas, Sandra Herrera, Gestora de Creatividad e Innovación del Consorcio Science Up en la UCN y Jefa del Laboratorio Biomaker de la Facultad de Ciencias del Mar (FCM), se trasladó a la Casa Central para homologar los contenidos formativos de ambos ciclos. Tras su reciente visita, indicó que “impulsar una cultura Maker en la educación superior es clave para transformar, integrar y experimentar con nuevas metodologías en los procesos formativos, promoviendo entornos donde la innovación, la tecnología y el aprendizaje activo se conectan con los desafíos reales del entorno”.

Estas iniciativas forman parte de las acciones que el Consorcio Science Up impulsa para articular ciencia, tecnología e innovación, en línea con los objetivos de transformar las facultades de ciencias, fomentando la innovación científica, el desarrollo de empresas de base científico-tecnológica (EBCT), transferencia tecnológica (TT) y la inclusión de la perspectiva de género en Ciencias.